Fuente: iProfesional.
El documento adelanta las siguientes medidas:
- No vamos a aumentar impuestos y sí vamos a redistribuir la carga tributaria, alivianando el peso que hoy tiene el sistema tributario sobre los sectores populares y la franja media, en especial PyMES, asalariados y autónomos, sin deteriorar las finanzas públicas.
- “Contractualizar” los beneficios y alivios tributarios que se otorgaron a las grandes empresas, manteniéndolos en la medida que se verifique el cumplimiento de objetivos de producción, inversión y empleo que se determinen a favor del crecimiento.
- Aplicación de impuestos extraordinarios por dos años: mediante una alícuota especial de Bienes Personales, a los activos reales y financieros radicados en el exterior; a las utilidades del sector financiero, aplicable sobre la rentabilidad sobre los activos (ROA) y sobre los fondos propios (ROE) de cada entidad; a la compra venta de divisas.
- Una mejora sustantiva en la lucha contra el fraude fiscal a partir de la inmediata coordinación de las administraciones tributarias del país, mediante la creación de la Red Federal de Administraciones Tributarias, la internalización del control “ex ante” y la coordinación internacional mediante la adopción de las iniciativas BEPS.
- Ampliar la devolución del IVA a su máxima expresión: no tiene un costo fiscal significativo en el largo plazo en tanto se limite a los sectores con ingresos más bajos o con tope máximo de devolución.
- Redefinir la estructura de los impuestos internos para alcanzar efectivamente y de modo diferenciado a las manifestaciones de consumo suntuario y superfluo.
- Incorporar un impuesto sobre las transacciones financieras con tasas diferenciadas según los objetivos de política económica, que reemplace al actual “impuesto al cheque”.
- Mejorar el gravamen sobre las rentas financieras para darle mayor progresividad al impuesto a las ganancias. No debe ser cedular: debe integrarse al resto de los ingresos computables.
- Redefinir el ajuste por inflación para evitar la multiplicación de quebrantos impositivos y la disminución de la recaudación en la Inspección de Personas Jurídicas.
- Crear un impuesto de alcance nacional sobre la propiedad inmueble, articulado y coordinado con el inmobiliario provincial.
- Recrear un Impuesto al Enriquecimiento Patrimonial a Título Gratuito (impuesto a la herencia nacional).
- Redefinir el sistema de incentivos fiscales mediante bonos de crédito fiscal administrados de forma centralizada.
- Armonizar los sistemas de retención y percepción en todo el país.
- Cumplir la manda VI de la CNA (Nueva Ley de Coparticipación Federal) basada en el principio de concurrencia fiscal.
- De esta manera, se busca que al finalizar el mandato de Alberto Fernández se cumplan los siguientes objetivos:
Situar la Presión Tributaria Total en 32% del PBI. Con 25 puntos en cabeza del Estado nacional y 7 entre provincias y municipios.
- Asegurar a las provincias y la CABA, en conjunto, recursos de origen nacional por todo concepto (automáticos y no automáticos) por no menos del 11% del PBI.
- Elevar la presencia de los tributos provenientes de rentas y patrimonios a no menos del 30% del total.